INVESTIGADOR PRINCIPAL
MÁS SOBRE
Pilar García MoutonEQUIPO DE INVESTIGACIÓN
Inés Fernández-Ordóñez, Universidad Autónoma de Madrid; David John Heap, University of Western Ontario; María del Pilar Perea Sabater, Universitat de Barcelona; Joao António Das Pedras, Centro de Lingüística da Universidade de Lisboa; Xulio Sousa Fernández, University of Santiago de Compostela.
ENTIDAD ASOCIADA
DESCRIPCIÓN
El proyecto plantea realizar un atlas lingüístico interactivo de las lenguas románicas de la Península Ibérica (ALPIi). El equipo lleva trabajando desde 2009 en la elaboración de los materiales inéditos del Atlas Lingüístico de la Península Ibérica (ALPI), una fuente de información lingüística de primer orden. El ALPI, ideado por Ramón Menéndez Pidal en la primera mitad del siglo XX el Centro de Estudios Históricos y dirigido por Tomás Navarro Tomás, es el gran atlas lingüístico que otras zonas, como Francia o Italia, poseen, de ahí la necesidad de ponerlo a disposición de la comunidad científica y de miles de otros usuarios potenciales.
Tiene la ventaja de proporcionar materiales comparables de todos los dominios románicos peninsulares (aragoneses, asturianos, castellanos –con sus diferentes variedades–, catalanes, gallegos y portugueses) y de tres países (España, parte de Francia y Portugal). Pero la novedad radica en la forma de acceso a sus contenidos y en su difusión, que se ajustan especialmente a los fines de esta convocatoria.
El proyecto plantea realizar un recurso informático sobre una selección de cien preguntas representativas –de fonética, léxico y morfosintaxis, más una importante información etnográfica complementaria– que no solo va a posibilitar la consulta en línea de los materiales del ALPI y su visualización, sino también su cartografiado dinámico a demanda. A parte de lo novedoso de proporcionar acceso inmediato en línea a unos datos inéditos y fundamentales desde el punto de vista lingüístico y cultural, este recurso ALPI supone un claro reto tecnológico, ya que no existen atlas del dominio hispánico que sean interactivos y que, además, ofrezcan el cartografiado dinámico de sus contenidos. Su utilidad social, como instrumento tanto para la investigación de excelencia como para el conocimiento y la enseñanza de las lenguas peninsulares, y de la cultura que vehiculan, resulta evidente (v. Memoria cientifico-técnica).