Esta presentación combina una perspectiva inter e intra-cohorte para estudiar uno de los resultados de la longevidad: la vulnerabilidad económica en la vejez. Este proceso se analiza a través de una combinación de un marco de estratificación social, que incorpora la teoría acumulativa de desventajas, y una perspectiva institucional enfatizando las políticas del curso de la vida.
A nivel macroeconómico, el aumento de la oferta educativa de los años 1930s a los 1960s y la progresiva implantación de un sistema de pensiones han sido las fuerzas motrices detrás de la fuerte disminución de la pobreza durante la vejez experimentada en las últimas tres décadas, creando diferencias muy relevantes entre las diversas cohortes.
A nivel individual, el camino desde la baja educación en edad temprana hasta las dificultades económicas después de la jubilación es, de hecho, el más importante. Este resultado apoya la teoría de la estratificación social. La incapacidad de aprovechar las oportunidades debido al bajo capital humano ha sido una fuente importante de vulnerabilidad.
Además, mientras que en la infancia y en la edad adulta, tanto la educación como un sistema de pensiones basado en la acumulación de capital a lo largo de la vida discriminaban a las mujeres, en la vejez, esto se ve compensado parcialmente por los sistemas de bienestar social.
