Carla Marín Benito, Premio Investigador Joven en Física Experi

Carla Marín Benito

PREMIO DE FÍSICA REAL SOCIEDAD ESPAÑOLA DE FÍSICA - FUNDACIÓN BBVA

Premio Investigador Joven en Física Experimental

2023

Profesora lectora de Física Teórica, Institut de Ciències del Cosmos, Universitat de Barcelona

CONTRIBUCIÓN

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Discurso de agradecimiento

El descubrimiento del bosón de Higgs en el año 2012 constituyó la comprobación final de que las predicciones del modelo estándar de física de partículas eran correctas en cuanto a las partículas básicas que forman la materia. Pero aún quedan predicciones de este modelo que no encajan con lo que observamos realmente en el universo, y la investigación de Carla Marín Benito tiene por objetivo resolver estas discrepancias. «El modelo predice una simetría total entre materia y antimateria, y en cambio el universo que podemos ver está formado solo por materia», explica la científica.

Profesora lectora en la Universitat de Barcelona, la estrategia de Marín Benito consiste en medir propiedades concretas de las partículas y estudiar cómo se desintegran e interactúan para averiguar si esas mediciones coinciden de manera precisa con las predicciones del modelo estándar. «Lo que intentamos hacer es ver dónde falla ese modelo, dónde se rompe», apunta.

“Las partículas en las que se centra mi investigación, los bariones, están compuestas por tres quarks —los componentes más básicos de la materia— y nos dan acceso a una nueva física”

En concreto, la científica se centra en los bariones, partículas compuestas por tres quarks (que son los componentes más básicos de la materia). Algunos de estos bariones están poco estudiados y, según afirma la premiada, «nos dan acceso a otro tipo de nueva física que no estamos viendo» al estudiar las partículas más comunes.

Marín Benito se doctoró en Física por la Universitat de Barcelona y ha sido investigadora en el Centro Nacional para la Investigación Científica (CNRS) en Orsay, Francia, y también en el Centro Europeo para la Investigación Nuclear (CERN), en Ginebra, institución con la que sigue colaborando asiduamente. A lo largo de su carrera, ha liderado experimentos que involucran a más de mil personas, y considera que la clave para lograr una colaboración provechosa es asegurar «mucha coordinación y mucha comunicación». Por eso recibe el premio como «un reconocimiento para mí y para toda la gente que ha estado detrás apoyándome».

La científica galardonada se interesó por la física de partículas gracias a algunas asignaturas de la carrera, en las que pudo ver «cómo puede haber predicciones tan precisas que luego los humanos podemos medir a través de experimentos». Aunque su investigación no está orientada a buscar aplicaciones prácticas, sus descubrimientos podrían encontrar una utilidad en el futuro: «No puedo decir, si descubrimos una nueva partícula, si vamos a hacer algo con ella algún día. Pero si no la descubrimos, seguro que no vamos a hacer nada con ella», argumenta, y añade: «Es solo a través del conocimiento básico que un día podremos pensar en aplicaciones de este conocimiento».