Juan Cruz Benito
PREMIO DE INVESTIGACIÓN SOCIEDAD CIENTÍFICA INFORMÁTICA DE ESPAÑA-FUNDACIÓN BBVA
Jóvenes Investigadores Informáticos
2019
Por sus contribuciones en el campo de la interacción Persona-Máquina y tecnologías emergentes, su proyección internacional y el impacto de sus resultados de investigación.
CONTRIBUCIÓN
Juan Cruz Benito, ingeniero senior de Software en IBM Research, asegura que el enfoque de su trabajo no es nuevo: «Llevamos analizando a las personas, intentado comprender cómo sienten y cómo se comportan frente a otras cosas, desde hace siglos». Sin embargo, lo que sí es novedoso en su tesis son las técnicas que ha utilizado para el estudio de la interacción entre personas y ordenadores. «Algunos de los algoritmos que he utilizado se aplican desde hace años en marketing, como en la segmentación de perfiles de usuario», explica. Aplicándolo a mundos virtuales en los que una persona tiene que interaccionar con un ordenador —como entornos de aprendizaje en videojuegos o encuestas largas, donde la fatiga del usuario interfiere con su participación—, el trabajo de su tesis se ha basado, principalmente, en intentar que el usuario consiga un objetivo de la mejor forma posible, de la manera más cómoda y sin perjudicar su privacidad o su experiencia.
Por «sus contribuciones en el campo de la interacción persona-máquina y tecnologías emergentes, su proyección internacional y el impacto de sus resultados de investigación», según señala el acta del jurado, Cruz Benito ha sido uno de los galardonados en la categoría Jóvenes Investigadores Informáticos.
«Simplemente buscamos mejorar la experiencia de usuario con el fin de emplear la aplicación de forma más efectiva y, sobre todo, que no cause fricción o desapego a lo que se está utilizando», explica. Aunque las técnicas empleadas provengan del área de la mercadotecnia, el investigador ha querido aplicar su trabajo a cómo la gente aprende en distintos contextos, tanto si hay un aprendizaje formal detrás como si procede de la utilización de una aplicación, por ejemplo, en el entorno laboral. «Había una necesidad de hacer un trabajo novedoso de acuerdo a esta revolución en la que estamos ahora mismo metidos», indica el investigador.
En la actualidad y desde que finalizó su tesis en 2017, trabaja en IBM Research, en un grupo que se dedica a hacer que la computación cuántica sea más accesible para los usuarios. Primero estuvo tres meses durante su estancia predoctoral y después consiguió un contrato, aunque sigue ligado a Salamanca, ciudad en la que vive y donde estudió. «Trabajamos en que la computación cuántica salga de los laboratorios, que empiece a ser utilizada por desarrolladores y por gente que no está tan especializada en este campo, con técnicas de inteligencia artificial y machine learning», concluye.