El entorno regional es relevante para el desempeño de las universidades y el proceso de inserción laboral de los titulados universitarios, tal y como queda acreditado en varios estudios del programa Fundación BBVA-Ivie (ver referencia al pie del documento). Es un hecho constatado en esos trabajos que las oportunidades de empleo son diferentes dependiendo de la comunidad autónoma donde nos encontremos. Así por ejemplo, la tasa de paro de los universitarios en Extremadura (13%) más que duplica a la de Aragón (5,6%) o Cataluña (6,3%). Sin embargo, las menores oportunidades laborales que puede ofrecer el entorno más próximo a algunas universidades no son un obstáculo insuperable. Y la movilidad geográfica se apunta como una de las claves para mejorar los procesos de inserción laboral.

Los estudiantes españoles parecen ser reacios a la movilidad en los primeros años universitarios. En el curso 2016-2017,  solo  el  14,2%  de los estudiantes de grado cursaba sus estudios en una comunidad autónoma distinta a la de su residencia habitual. Sin embargo, la movilidad universitaria se intensifica entre los estudiantes de máster. Estos estudiantes, más maduros y formados, amplían su abanico de opciones a la hora de elegir dónde realizar su formación de postgrado, y el porcentaje de alumnos que estudia fuera de su comunidad autónoma asciende al 26,7%.

El análisis por regiones arroja resultados muy dispares. La especialización y la oferta de los diferentes sistemas universitarios autonómicos influyen en la movilidad universitaria pero también intervienen otros factores exógenos a las universidades como son la localización geográfica y la proximidad de universidades pertenecientes a otras comunidades autónomas. Encabezan el listado por regiones La Rioja y Castilla-La Mancha con más del 55% de universitarios estudiando un grado en otra comunidad. Les siguen Illes Balears y Extremadura, con más del 40%. Estas cuatro regiones se caracterizan por contar con una única universidad, pública y presencial.

En el extremo opuesto se sitúan Cataluña, Madrid, Andalucía y la Comunitat Valenciana, donde el porcentaje de estudiantes de grado que opta por salir de la región no supera el 10%. Estas cuatro comunidades constituyen los sistemas universitarios regionales más grandes, contando todas ellas con al menos nueve universidades.

La visión complementaria la ofrece el porcentaje de estudiantes que cursa su grado o máster en una región pero procede de otra. Cerca de un tercio del alumnado de grado de las universidades navarras procede de otras regiones y el 29% en el caso de Madrid o Castilla y León. Entre los estudiantes de máster esta movilidad se intensifica y en seis comunidades autónomas al menos el 30% de los estudiantes tienen su domicilio familiar en otra región, destacando especialmente la Comunidad de Madrid, donde el 51% de su alumnado nacional de postgrado procede de otra autonomía.

La comparación de estos efectos, que se pueden denominar expulsión y atracción de estudiantes, permite obtener el saldo neto de cada región. Tres comunidades autónomas presentan un saldo positivo tanto en estudios de grado como en los de máster. Estas son la Comunidad de Madrid, Cataluña y la Comunitat Valenciana.

Los datos hasta aquí mostrados se centran en las salidas y entradas de estudiantes en relación con el tamaño del sistema universitario regional al que pertenecen. Sin embargo, resulta interesante identificar cuáles son los principales destinos de los más de 150.000 estudiantes de grado y 31.000 de máster que optan por la movilidad nacional. En el primer caso, la Comunidad de Madrid atrae al 39,6% de los estudiantes de grado móviles, le siguen Castilla y León con el 11,7%, Cataluña con el 9% y Andalucía y la Comunitat Valenciana con alrededor del 8%.

En el caso de los estudiantes de máster, Madrid sigue siendo el principal destino elegido. Sin embargo, su proporción se reduce (27,9%) y Andalucía (15,6%), Cataluña (15,5%), y la Comunitat Valenciana (13,6%) aumentan su importancia como regiones receptoras de estudiantes de postgrado.

El 14,1% de los titulados universitarios trabaja en una comunidad distinta a aquella donde estudiaron

La Encuesta de Inserción Laboral de los Titulados Universitarios del INE permite analizar la movilidad laboral en 2014 de los graduados en universidades españolas 3 años antes. Este es el periodo que se estima necesario para estabilizar la relación con el mundo laboral tras la conclusión de los estudios. Los datos muestran que el 14,1% de estos titulados universitarios trabaja en una comunidad distinta a la que estudiaron.

La elección de la universidad donde cursar los estudios es fundamental para el futuro profesional. Existen diferencias en la oferta de titulaciones y en los resultados docentes, investigadores y de empleabilidad obtenidos por las universidades españolas, como así lo reflejan los rankings universitarios y analizan diferentes estudios. Por ello, es importante fomentar la movilidad universitaria que permite considerar un mayor número opciones. Además, los futuros alumnos deben contar con la mayor información posible a la hora de tomar esa decisión, que afectará tanto a sus resultados académicos como a su posterior inserción laboral. Las universidades, por su parte, deben facilitar y fomentar esta movilidad, que ayuda a contemplar un mercado más global, mediante los programas de intercambio, estancias y prácticas laborales en otras regiones.

Para ampliar esta información pueden consultarse: Itinerarios de inserción laboral y factores determinantes de la empleabilidad: formación universitaria vs entorno y La universidad española: grupos estratégicos y desempeño (Fundación BBVA 2016 y 2017)

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