Uno de los aspectos que más preocupan del envejecimiento demográfico previsto para las próximas décadas es el impacto que éste pueda tener sobre la evolución futura del número de ancianos dependientes. El presente documento de trabajo, a partir de los microdatos de la Encuesta Nacional de Salud de 1993 y 2001, se propone un doble objetivo: por un lado, determinar cuál ha sido la evolución durante ese período de los problemas de dependencia entre las personas mayores de nuestro país y, por otro lado, analizar la influencia que sobre la misma hayan podido tener distintos factores sociodemográficos.

Los resultados obtenidos muestran un descenso de más de dos puntos porcentuales en el porcentaje de personas mayores con problemas de dependencia entre los años 1993 y 2001. Por otro lado, respecto a los factores asociados positivamente a dicha evolución, destacan la estructura etaria de la población mayor, el nivel educativo de la misma y una menor prevalencia entre ésta del consumo de tabaco; por su parte, en cuanto a las variables que estarían oponiéndose al descenso observado, cabe destacar el aumento en el porcentaje de personas con problemas de sobrepeso y obesidad, así como el incremento en las tasas de prevalencia de ciertas patologías crónicas.