Los problemas regionales reciben en España una gran atención, en especial desde que se inició la amplia descentralización política y administrativa contemplada en la Constitución de 1978. En el ámbito económico, los cuatro temas más tratados en los estudios y debates son el crecimiento regional y sus fuentes, las políticas económicas regionales y sus efectos, la financiación de las comunidades autónomas y su endeudamiento, y los resultados financieros de la actuación del sector público sobre los territorios (balanzas fiscales).

El proyecto de investigación en el que se basa esta monografía se propuso dar un paso adicional en esa dirección, para avanzar en dos sentidos. En primer lugar, generando nueva información sobre la actuación del sector público en España y sus regiones. Y, segundo, analizando los datos obtenidos con el propósito de evaluar con mayor precisión la intensidad de la actuación del sector público en las regiones, la lógica que subyace a sus diferencias y sus implicaciones desde la perspectiva de la solidaridad interterritorial y de la eficiencia económica.

A partir de los resultados obtenidos, existen razones para poner en cuestión la tesis de que hay un problema generalizado de exceso de gasto y que este se deriva de la descentralización. En cambio, los datos ofrecen argumentos para defender otra tesis alternativa: la actuación territorial del sector público en España es muy desigual y no responde a patrones o criterios claros de necesidad, sino a causas que tienen que ver con la trayectoria histórica y con la capacidad de los territorios de condicionar las decisiones del Estado. Las asimetrías y diferencias regionales en las actuaciones públicas no niegan la existencia de solidaridad interregional, pero la hacen confusa en distintos ámbitos, pues algunas regiones con problemas similares no reciben el mismo trato. En cuanto a la contribución del gasto público a la eficiencia económica, no se puede negar la contribución del mismo al desarrollo regional, pero más sosteniendo la demanda de algunas regiones de manera permanente que mejorando la productividad de todas.

Conviene subrayar que estos resultados no son solo consecuencia de las actuaciones de las comunidades autónomas sino del conjunto de las Administraciones Públicas.