Los programas de Rehabilitación cardíaca fueron aconsejados por la OMS hace más de cuarenta años con el fin de reincorporar a la sociedad a los pacientes con cardiopatías de la forma más completa y normalizada posible.
Las actuaciones en estos programas han de ser multidisciplinares. Incluyen entrenamiento físico, sesiones de relajación, terapia psicológica y pautas de control de los factores de riesgo cardiovascular.
La mayoría de los pacientes que realizan Rehabilitación cardíaca se ven afectados por cardiopatía isquémica o enfermedad coronaria, y fundamentalmente los que han presentado un infarto de miocardio o han sido sometidos a cirugía coronaria. Las indicaciones se amplían a cualquier enfermo cardiópata y a las personas sanas con factores de riesgo de padecer lesiones coronarias ateroscleróticas.
Los programas han demostrado que producen una significativa mejoría en la calidad de vida de los enfermos y que disminuyen la incidencia de nuevas complicaciones y de fallecimientos.