Montserrat González Estecha
Los efectos sobre la salud de los contaminantes ambientales dependen no sólo de la dosis, la duración y el tipo de exposición, sino también de las características individuales y los hbitos de la persona expuesta.
Los pacientes ancianos, los niños, las mujeres embarazadas, los que presentan una enfermedad pulmonar o coronaria, las poblaciones con un nivel socioeconómico más bajo y los diabéticos están sometidos a un riesgo mayor.
La exposición ambiental a metales pesados produce efectos cardiovasculares en dosis muy bajas. Prácticamente toda la población está o ha estado expuesta por la utilización de gasolina con plomo y la contaminación de aguas y suelos.
La fuente antropogénica más importante de contaminación atmosférica en las sociedades urbanas e industrializadas es la combustión de combustibles fósiles.
No existen niveles considerados seguros para la mayoría de los contaminantes ambientales, por lo que es imprescindible eliminar o limitar algunas fuentes de exposición, como el humo del tabaco en lugares cerrados, y modificar algunos hábitos de vida, como la alimentación o el consumo de alcohol y tabaco.